La eficiencia energética es una cuestión que nos preocupa por varios motivos. No solamente se trata de una de las mejores formas de llevar una vida más sostenible y ecológica, sino que nos permite vivir más cómodamente, ahorrando incluso en nuestras facturas.
En este sentido, conocer la forma correcta de optimizar tu vivienda resulta esencial para conseguir el certificado de eficiencia energética. A continuación te explicamos cómo lograrlo.
¿Qué es el certificado de eficiencia energética?
Se trata de uno de los documentos más codiciados, ya que es necesario, por ejemplo, para alquilar o vender una vivienda antes de realizar la transacción. Aunque no sea el caso, este documento también te aporta una información muy relevante sobre tu hogar, ayudándote a mejorar sus condiciones ecológicas.
Para conseguirlo es fundamental contar con una inspección realizada por un profesional del sector. Esta persona comprobará cuáles son las características de la vivienda, su consumo de agua, luz y electricidad, la forma de calefacción, ventilación, etc. Según la valoración que el técnico haga en esta visita la vivienda obtendrá su correspondiente puntuación dentro del sistema de baremación del certificado, el cual consta de una escala de siete letras (de la G a la A).
Ahorrar energía con las nuevas tecnologías
Para conseguir los mejores resultados en el proceso de certificación de tu inmueble es conveniente que mejores la sostenibilidad del mismo rebajando el consumo de los recursos. Esto se puede hacer con pequeñas o grandes reformas, por ejemplo, instalando unas ventanas de calidad que aislen bien la vivienda o recurriendo a las nuevas tecnologías.
Los beneficios de la domótica en el ahorro de energía
El uso de las tecnologías punteras en el hogar se conoce como domótica. Sus aplicaciones son múltiples y no son exclusivas del ahorro energético. Nos referimos a las cámaras de vigilancia o a los vídeo porteros. Ambos son elementos de seguridad con los que estamos muy familiarizados en el ámbito doméstico y que, como sabes, forman parte de las ventajas de la domótica.
A la hora de hacer tu vivienda más eficiente, una casa inteligente te ayudará a controlar los niveles de consumo de agua, luz y electricidad. De esta forma, podrás optimizarlos, evitando un consumo excesivo, que además resulte innecesario. Por ejemplo, los sensores térmicos o lumínicos te ayudarán a regular la temperatura del hogar o el nivel de las luces minuto por minuto, ajustándolos a las necesidades de cada momento.
Este tipo de sistemas también resulta muy útil para minimizar el consumo eléctrico de fondo: apagando aparatos que no están en uso o evitando las luces de standby que consumen mucho más de lo que nos imaginamos. Así mismo, serán tus aliados cuando estés fuera de casa, ya que ayudarán a que la vivienda se mantenga en funcionamiento sin producir un exceso de consumo.
Como ves, a través de los avances tecnológicos resulta más fácil que nunca contar con una casa con eficiencia energética. De este modo, podrás disfrutar de una vivienda ecológica y cumplir con los requisitos principales para obtener el certificado con las mejores calificaciones. ¿A qué esperas para beneficiarte de sus ventajas?
